Francisco José Cansado
Maestro ebanista y carpinteroMuebles artesanales y a medida
Yo, Francisco Cansado
Inicios
Fue en 1976, al terminar mis estudios, cuando comencé a seguir los pasos de mi padre en el oficio de la carpintería. Recuerdo aquellos primeros días en su pequeño taller cuajado de olores y herramientas imposibles.
Mil preguntas agolpándose en mi mente y una sola respuesta para todas ellas: “Paciencia, despacio, no tengas prisa. Antes que nada aprende el lenguaje de la madera y después podrás conversar con ella.”
Y así día a día, casi sin darme cuenta descubrí que la pasión por mi trabajo fue y es la fuerza e ilusión que hoy guían mi vida.
Estudios
Cursé mis estudios de dibujo industrial y aprendí los caminos teóricos del oficio pero comprendí pronto que la verdadera maestría en la ebanistería no se adquiría sólo en los libros y que era también necesario cerrar los ojos, tocar con las manos, coger, sentir la madera y escuchar lo que las vetas nos hablan: Tiempo, clima, vida. Y aprendí que en este oficio, como en cualquier otro, la perfección no es posible sin un profundo sentido del respeto y honestidad en todo lo que hagamos.
Taller
Y llegó el día en que a mi padre me pasó el testigo al frente del taller y así me trasladé a Cuarte de Huerva, amplié las instalaciones y lo equipé con máquinas más modernas y precisas, al tiempo que procuraba preservar el espíritu original que de mi padre aprendí: “Somos artesanos, creadores, lo que hagas hazlo con pasión, esto es el pasado y será el futuro».
Muebles Cansado hoy
En la actualidad sigo trabajando para hacer realidad cualquier sueño de mis clientes. Mi profesionalidad y vocación me permiten crear muebles originales, único. No importa la forma, el tamaño, o el uso. Restaurar, decorar, reparar, es mi pasión. Utilizo todos los instrumentos, materiales y técnicas que exigen los nuevos mercados. Me gusta compartir ideas, innovar, desarrollar cualquier proyecto en todas sus etapas. Y sobre todo consejar y ofrecer soluciones. Todo ellos sin olvidar nunca la principal motivación que me empuja a diario: Que mis clientes obtengan la máxima satisfacción con la calidad del trabajo que realizo.